lunes, 30 de junio de 2008

Otra crónica de la QH

Normalmente no copiaría otras crónicas aquí, pero es que esta es de las que de verdad llegan a tocar fibra sensible. Es la narración de la QH por Juanfran, uno de los compañeros piratas que fueron conmigo (el tercero por la izquierda en la foto de mi crónica), y que no pudo acabar. Merece la pena leerla.

La otra cara de la moneda.

Es la vida. Unas veces ríes y otras acabas llorando. En ocasiones te comes el mundo y en otras, sin embargo, te proteges de un entorno que parece morderte. Ying y Yang. Gato y ratón. Blanco y Negro. Opuestos. Contrarios. Y necesarios, como los dos enveses de la hoja de un árbol. Como las dos caras de una moneda. Un día ciclista, en una ruta no muy lejana, sientes una felicidad tal que no cabes en ti; otro, el sábado, te sientes mal. Triste. Afligido. Pudo ser pero no fue. Y escondido tras las gafas, disimulándolo por el calor, te ves unos instantes llorando en la cima del puto Marie Blanque. Contrastes. Creía en lo contrario mientras bajaba Somport.

No soy un pro, no vivo como un pro y ni tan siquiera entreno como uno de ellos. Ni puedo y, podría asegurar, ni quiero. Es otro nivel. Otro universo. Otra dimensión. De charlas, de vistas a los lados, de guiños cómplices con el voluntario que se está torrando en un cruce francés, que ni le va ni le viene, sólo para que yo, por un día, me sienta un poco más grande. Es lo que siento.

Por eso me encanta el ambiente de la Quebrantahuesos. Tantas bicis juntas, tantos amigos, tanta gente a la que quieres ver y, sin embargo, no encuentras… Es necesario algo así, esté donde esté. Pero está en Sabiñánigo; así lo creo. Y te ves ahí, en el mismo sitio del que has escuchado decenas, cientos, miles de historias y anécdotas. Del que has leído todo lo publicable. De un sitio que conoces sin conocer. Ojo rampa; bien bien, kilómetro suave. Descenso. Avituallamiento. Otso ondo, otson ondo. Y una ilusión: decir que has completado el recorrido de la QH. O quizá, en el camino, sentir en las carnes propias la parte final del Portalet y, en la medida de lo posible, el ambiente de la parte final del coloso. 

La mañana de la marcha no comenzó bien. Notaba molestias en el lado derecho. Mecagüen, pensé, le comenté a Alberto, uno de los siete Piratas que compartimos alojamiento en Tramacastilla, precioso pueblo colgado de la montaña. Molestias. Bueno, a ver qué pasa, que 205 km dan para mucho. No he podido salir en los últimos días, con lo que no he podido reforzar la autoestima con ese puntito de optimismo que te da el rodaje. Pero me conozco. Mejor que nunca, de hecho. Y eso, y es para agradecerlo, es gracias a mucha gente con la que he compartidos kilómetros. Tengo el coco necesario y, gracias al trabajo, he tenido tanto lío que no he tenido tiempo de visitar foros y contagiarme de ese aroma previo a una gran cita como ésta. Hubiera sido, así lo creo, contraproducente: me hubiera puesto nervioso. Pero no tenía nervios. O el haber estado en Sabiñánigo en 2007, en la Treparrisco, me hizo vacunarme contra el miedo escénico. A saber.

Las molestias se olvidan cuando, en la cola del pelotón, esperas. Hablas con tus compis, con Andrés y su hermano Sergio, con Josep, tres Piratas que navegan por el mountain bike pero que has seducido por que, por unas horas, se pongan slicks y se aventuren a abordar la dama blanca. Charlas con gente de clubs, te haces fotos. Bromeas. Alegría. Joer qué gozada antes de la marcha. ¡Coño! ¡No puede ser! Justo detrás de mí, el Zarabici con el que acabé en Lagos. Un saludo, otra foto. ¡Qué grande es este deporte!

Y llega el petardazo. Tardamos, pero comenzamos a movernos. Primero a saltitos, luego con pedaladas suaves, poco después con un ritmo letárgico. Nos agrupamos los Piratas del furgón de cola (otros van por delante), nos reencontramos con amigos y vamos hacia la entrada de Sabiñánigo. Y ves cómo se vuelca el pueblo, cómo a las ocho de la mañana las calles están abarrotadas para aplaudir a amigos, familiares,… La QH es un acontecimiento. Intento provocar una ola. Veeeeennnngaaaaa ahíiiii. Y consigo, en una curva, que varios se animen. Y aparece una ola, pequeña, pero ola. Mi modesta contribución a la alegría. Gracias por estar ahí, gente de puta madre.

Hacia Jaca se vuela, pero entre charlas, buscando un ritmo de crucero acorde a flacas y mountain bikes, con algún saludo esporádico a conocidos que van más rápido y un APM cuyo nombre no recuerdo –reitero mis perdones-, te ves en las primeras suaves rampas del Somport. Bonitas perspectivas. Bonitos pueblos. Y la espalda se sobrecarga. Mierda, piensas. La cosa se pone seria antes de la Torre de los Fusileros. Ahí pego el primer amago. Joder, no puedo trasmitirle ritmo a los pedales. Siento fuerza, pero no puedo canalizarla. Es una sensación molesta. Andrés me mima. Venga, vamos. Pero no puedo. Pasamos Canfranc y la evidencia es grande: no va a ser tu mejor día, muchachote. Me descuelgo. Los Piratas me esperan. Me jode por ellos. Intento acelerar para que no me tengan que esperar, pero ellos a mi ritmo, a su vez, pierden la posibilidad de ir a su velocidad de crucero. Es la ley del más fuerte. Nos pasan muchos.

En el primer avituallamiento hay una tregua. Como, bebo y me masajeo. El parón me viene bien. O quizá no, es un engaño. La cima está muy cerca y no tengo tiempo de volver a sentir achaques. Ruedo reagrupado con los Piratas, pero antes de unas instalaciones de la Guardia Civil se me van otra vez. Josep me espera y me anima a unas simpática aficionadas con las que compartiría después un rato en la meta. La reostia de gente. Llego a la cima, el mismo sitio donde cinco kilómetros más abajo me decía que me daría la vuelta. Pero venga, vamos a probar. Me hago una foto arriba, tras decirle a los Piratas y a Pedro, otro colega, que paro un rato. No confiaba en cogerles en la bajada, pero sí en el tramo llano.

Me lanzo. Bajo mal, pero en Somport me lo paso realmente bien. Voy con cuidado, a una velocidad alta para lo que soy yo. Voy con precaución, pero sin ir cagado. Y me gusta verme así. La espalda, sin embargo, va a más. En la bajada me atormenta y, de hecho, tengo que parar un par de veces , ya al final de valle, para que se me pasen las molestias. Ruedo sólo como diez kilómetros, por tierras francesas, degustando los aromas del verdor y los torrentes. Yo y mis dolores. Paso un pueblo, llega un repecho y veo las estrellas. Vengo de un desarrollo y la espalda, que no las patas, me piden otro muy distinto. Contradicciones. Así no joanfry. Veo una ambulancia. Y si… Pienso y les llamo. Me echan un poco de réflex. Vamos a probar. Efecto placebo. Me veo recuperado. Cojo un poco de tono y logro rodar un poco con Ángel Toña, el fundador de Ciclismo a Fondo. Me sonaba su nombre, que leí en el dorsal, y le comenté que disculpase mi indiscreción, pero que me sonaba a “periodista”. Bingo. Historia del periodismo ciclista. Y hablando un poco me veo en el Marie Blanque. El inicio, como lo soñé. Precioso. Evocador. Huele hasta asfalto derritiéndose. Busco un ritmo. Lo encuentro, a duras penas. Una fina frontera entre el movimiento y las molestias. Es fastidiado estar metido en faena con una sensación negativa: el dolor. Un desgaste adicional. Paro donde el agua. Charlo con la gente un poco. Bromeo. Me pasan motos, ambulancias y hasta un autobús, que me abre la puerta. Sigo, sigo, le digo. Llega lo duro de la Dama Blanca. Paso un kilómetro con más pena que vergüenza. Paro. Segundo aviso serio. Ando un poco. Me pasa un cicloturista con una bici rara y alforjas, ajeno a la marcha. El ritmo es bueno, pero, tras montar, no le puedo seguir. Veo el reloj. Echo cuentas. Los cierres de paso son generosos, pero no milagrosos.

Estoy tan jodido pensando que hacer que el calor me da igual. Hace mucho calor. 40 grados. Cierro los ojos. Decido no atormentarme más. Lo dejo. Me bajo de la bici y claudico ante uno de la organización, que me veía venir de maduro. No puedo evitar que se caigan las lágrimas, camufladas entre las gafas. Me maldigo, maldigo el Marie Blanque, me cago en su puta madre, en su puto asfalto, en su puto calor. Lo dejo. Me bajo. Adiós. Le mando un sms a Andrés, que me llamó un par de veces antes, pero la cobertura fallaba: Me retiro. Llegad por mí.

(….)

Un servicio exprés, un minibús rellenado en la cima del Marie Blanque, nos lleva a la meta. Las bicis van en otro camión. Comparto viaje con Pedro, olé sus cojones. Allí me tomo unas cervezas, como y no dejo de darle al coco. Me cuesta hasta andar. Si me siento, al ponerse en marcha me duele toda la pierna derecha. Maldigo todo. No volveré a la QH. Logro hablar con Andrés: estamos a diez de coronar el Portalet. Venga, chavales, a por él. Lo lograron. Cuatro horas después llegaron. Por goteo, de uno en uno. Primero Sergio, luego Andrés y luego Josep. Antes llegaron Alberto e Iñaki, dos habituales, dos fenómenos. Antes, mucho antes, Serpal. Su marcha es otra.

Veo llegar a la gente muy tocada. Veo a un chaval que se queda sin entrar en meta (me cuesta usar esta palabra). Sólo quiere vomitar. Está mal. Bajonazo de tensión. Le mojamos, a ver si se recupera. Llamamos a los bomberos, que estaban al lado. Acaba viniendo una ambulancia. Se lo llevan. Estaba muy jodido. ¿Merece la pena eso? Retirado al lado del final. Tu eres un campeón , pero no aparecerás en las clasificaciones, joder. Una de las chicas del Somport, que estaban por meta, le cogen el chip y va andando a la alfombra. Detallazo. Ese chaval se merecía entrar en las clasificaciones. Le valida el chip y se lo vuelve a poner. Él, pobre, no se entera. Está muy mal. Me entero de historias de gente que ha recibido suero, asistencia médica más seria. La QH es dura, pero el calor la ha endurecido más. Me alegro de haberlo dejado: quizá hubiera sido imprudente.

Y de golpe tardan más en llegar los participantes. Cada grupo es más pequeño; cada cara un poema. Me pongo en la cuneta a aplaudir. A gritar. A animar. Esos tíos se lo merecen. La espalda, sinceramente, me da igual. Muchos lo agradecen: te saludan, te ofrecen la mano, se santiguan, sonríen entre rictus de esfuerzo. Quizá crean que yo, todavía de ciclista, soy un machaca de menos de siete horas. Me preguntan, uno que pasaba por allí, que quién ganó… No lo sé, le digo. Diez segundos de silencio y le volví a responder: todos estos que están entrando son los que han ganado. Supongo que, básicamente, es envidia sana. Sentimiento animal: yo querría sentir eso. Y veo que son cuatro páginas en Word las que ya están manchadas de reflexiones. Pensamientos escritos desde la desilusión, valoraciones de quién y cómo soy yo como cicloturista. De mis límites, de mis impedimentos. Cuestiones de balanza, de sopesar.

Y te acuerda del puto Marie Blanque y buscas cómo poner un punto y final medianamente coherente a todo este tocho con una lagrimilla por el rabillo del ojo.


Juanfran! el año que viene... Vendetta! 

Vuelta a las zapas

El sábado volví a calzarme las zapas de correr después de casi dos meses de parón.

Cayeron 5km a 4'58", lo cual no está nada mal dado que no pretendí forzar en ningún momento. Ahora el plan es ir poco a poco haciendo km en julio y agosto para luego hacer un entreno más específico de cara a la Behobia.

viernes, 27 de junio de 2008

YAWYD: You Are What You Drink

Niner YAWYD: Eres lo que bebes.

He aquí un monumento a la belleza de lo inútil ;-). No aporta nada desde el punto de vista ciclista pero... hay que reconocer que esta tapa de dirección tiene su encanto. La he pillado para ponerselo a la Mónica cuando esté (espero que no tarde ya demasiado), aunque para las fotos y de momento lo he montado en la Dean.

El kit completo (birra no incluida, debe ser adquirida separadamente ;-):
La Dean con la tapa habitual:
Con el YAWYD montado:
Et voila!

jueves, 26 de junio de 2008

QH 2008: comparación de tiempos con el año pasado

Por curiosidad he comparado los tiempos de paso entre este año y el pasado. Los apunto ahora en caliente para tener las referencias para el futuro ;-)
  • Jaca (justo después de la bajada) pasé este año en 46'45", y en 2007 tardé 2' menos en el mismo punto.
  • Cima de Somport: 2:06:20 en 2008 y 2:00:40 en 2007 (6 minutos de diferencia acumulada, 4 en la subida al puerto).
  • Pie del Marie Blanque: 3:06:30 en 2008 y 3:00:00 en 2007 (es decir, exactamente el mismo tiempo de descenso).
  • Chip MarieBlanque (avituallamiento): 4:26:53 en 2008 y 4:00:48 en 2007! ya vamos 26 minutos perdidos...
  • Cima de Portalet: No tengo datos reales porque el cuenta sólo marca el tiempo sobre la bici, no las paradas, así que es engañoso. Pero este tiempo sobre la bici (entre el avituallamiento del MB y la cima del Portalet) fue de 2h56' en 2008 frente a las 2h31' de 2007 (casi media hora de diferencia en la subida... y sin contar las paradas!). 
  • Chip Hoz: 9:25:40 en 2008 y 7:46:45 en 2007. Es decir... 1h38' :-S
  • Meta: 10:07:16 en 2008 y 8:24:27 en 2007. Diferencia final: 1h42'.
En fin, que como ya sabía... la Dama te mata y el Portalet marca la carrera. 

La próxima a por el oro!

lunes, 23 de junio de 2008

QH 2008: algunas fotos

No son de muy buena calidad, pero algo es algo ;-)



Y la mejor: la foto de la expedición pirata cenando la vispera ;-)

domingo, 22 de junio de 2008

QH 2008: la crónica

Ya estamos de vuelta en casa! aquí va el ladrillo de la QH 2008:

El viernes al mediodía cargo los bártulos en el coche después de comer y pongo rumbo a Sabiñanigo. Me gustaría decir que viaje sin más historias, pero en el atasco de Jaca me dan por detrás. Por suerte estábamos casi parados y no ha sido nada (aunque el sistema de ayuda al aparcamiento hace ahora cosas raras :-S). En Sabiñanigo me encuentro a Anita y Pedro (siempre es un placer verles), y pronto llegan Iñaki y la grupetta catalana compuesta por Velo, su hermano Sergi y Josep, que viene a hacer su primera marcha cicloturista y además con una BTT con slicks!. El comentario en la zona de recoger los dorsales es común: que calor que hace!

Subimos a Tramacastilla donde tenemos el apartamento y luego a cenar a Escarrilla los consabidos spaguettis y arroz con leche de postre. Hay que llenar bien el deposito para el sábado! El día D nos levantamos a las 5 para tener tiempo de desayunar bien, bajar a Sabiñanigo, aparcar, etc.. Serpal amanece como siempre atacado y en cuanto desayuna baja ya para la salida. El resto nos lo tomamos con más calma (y pillamos atasco jejejeje). Finalmente aparcamos, inflamos las ruedas, nos damos cremita de sol y a la salida! como siempre, ambiente increíble.
PUM! el cohete que da el inicio a los primeros de la fila hace que 8000 ciclistas lancen sus gritos de guerra. Como 12min más tarde pasamos nosotros por el arco de salida. Para cuando salgan los últimos, la cabeza de carrera les llevará ya casi media hora...

Los primeros km los hacemos a buen ritmo. Vemos a Potablava y después de un rato de charleta tiramos hacia delante, con un parcial de 37km/h de media al pasar Jaca. La subida a Somport a ritmo normal (para mi), con un avituallamiento rapido. En la subida vemos a Tarmac que se ha acercado a animar. Coronamos en 2h06min y descenso en mi linea (entre acojonado y excesivamente prudente :-P). Eso si, de vez en cuando veo gente fostiada en los laterales.

Nos plantamos a pie del Marie Blanque en 3h04min (a 30 de media). Empiezo bien la subida, pero... que calor. Paso el primer km de los malos, pero cada vez subo más de pulsaciones. En un momento dado me pongo por encima de 180ppm. Me empiezo a notar mareado y acabo echando pie a tierra para sentarme en la sombra. Igual que en 2005. Me recupero un poco y aprovecho para sacar un par de fotos que reflejan lo que se vivía (poned la calefacción a tope mientras las veis para que sea mas realista ;-):

Continuo la marcha pero no me siento nada bien, todo el rato como mareado y tengo que parar una segunda vez a bajar pulsaciones. Me acuerdo varias veces del piñon de 27 que con chulería he dejado en casa (otro año no hago la chorrada ;-). Finalmente corono e inicio el descenso al avituallamiento donde Iñaki lleva ya rato esperando. Le digo que tire porque me noto muy muy muy petado, pero insiste en (un año mas) quedarse conmigo para hacer de gregario de lujo. Me da un poco de palo por él, pero la verdad es que sabía que iba a agradecer la compañía en los km que quedaban ;-)

Como un par de plátanos y una cocacola para llenar el deposito y descenso del Marie Blanque sin mayores historias. Pillamos un buen grupito y voy reservando energías hasta Laruns, donde comienza la subida a Portalet que estaba viendo que se me iba a hacer muuuuuy larga :-S. Me meto un gel y me trato de mentalizar para 30km de puerto... 

Los primeros km lo llevo más o menos bien (tampoco tienen casi porcentaje) y vamos en un grupo animado por unos andaluces que llevaban un cachondeo que pa'que, lo cual hace que me entre la risa en algunos momentos a pesar de lo jodido que iba :-D. Pero pronto el fuerte calor y la petada que llevo me pasan factura y tengo que reducir el ritmo. Por suerte enseguida llegamos al avituallamiento líquido donde paramos a refrescarnos un poco y meterme otro gel. Como anécdota, dejamos las bicis al sol y cuando nos pusimos de nuevo en marcha el termómetro marcaba... 44º!!! Menos mal que una vez en marcha y en las zonas de sombra la temperatura era de "sólo" 36º-38ºC :-P. Por la cunetas vamos dejando gente tirada y las ambulancias no hacen más que ir de arriba a abajo socorriendo a los que han superado su límite.

Continuamos la ascensión hasta la presa, donde después de un kilómetro duro tenemos un par de km de descanso hasta llegar al avituallamiento sólido. Paramos a comer y descansar un poco y nos fijamos en que hay ya dos autobuses llenos de gente que se retira, además de bastantes coches particulares que han ido a rescatar a alguno. Hummm... tentador... pero la mirada fulminante (y la amenaza de que me daba dos os**as) que me hace Iñaki me hace volver a montar en la bici y tirar hacia la cumbre. Comienza la peor parte del puerto. A los 4 km no aguanto más y paramos en uno de los torrentes a refrescarnos de nuevo y gastar el último cartucho de gel. Y de ahí, ya seguido hasta arriba a mi ritmo. Penando pero si tener que echar pie a tierra. Por fin corono. Ya está hecho!

En el descenso de Formigal nos adelanta Anita con el coche. Me da un grito de ánimo, pero voy tan agarrotado que no puedo ni soltar el manillar para saludar. Encima hace un poco de viento y la bici me hace algún extraño con las ruedas de perfil (aún no me he acostumbrado). Torcemos hacia el Pueyo para enfrentarnos a la última tachuela del día: la jodida Hoz de Jaca. Voy ya totalmente vacío, pero como ya la conozco bien y son sólo 2km, meto todo el desarrollo y piano piano llego arriba. Descenso divertido y nos incorporamos de nuevo a la carretera de Formigal para seguir bajando hacia Biescas. Enganchamos un grupito para hacer los últimos km pero voy fundido en la cola haciendo la goma, y eso que no vamos especialmente rápido! otros años en ese tramos se volaba pero esta vez íbamos a 30 o poco más, y pese a todo me las veía putas :-S. Menos mal que Iñaki estaba atento y cada vez que me descolgaba me re-enganchaba con el grupo :-).

Finalmente, recta de meta, donde vemos a Juanfran animandonos (de lo que deducimos que se ha retirado) y pasamos juntos sobre la alfombra con un tiempo de 10h7min. Es decir... 2 horas más de lo que me hubiera gustado. El peor tiempo con diferencia en mis 3 participaciones. He tardado 1h 30min más que el año pasado! Bueno, es lo que hay con este calor... y lo que tiene no haber entrenado todo lo debido :-S

Eso si: no puedo decir que no lo he dado todo. Nada más pasar meta nos encontramos con un colega de Iñaki (al que por cierto le tuvieron que poner suero) y paramos a comentar la jugada. Total que según íbamos hablando me empiezo a encontrar peor y peor hasta que llega un punto que me tengo que ir a una sombra a sentarme. Dejo la bici tirada, me quito el caso y me tumbo totalmente mareado y sin fuerzas casi ni para hablar. Iñaki se queda conmigo y se acerca algún conocido (Tarin, Potablava) a interesarse por mi estado, pero yo lo único que quiero es quedarme ahí tumbado con los ojos cerrados (gracias si estáis leyendo esto ;-). Finalmente como una hora después llegan Velo y Sergio y ya me encuentro mejor y incorporo para felicitarles por su hazaña. Al poco llega Josep, rozando el fuera de control después de sus calambres en Portalet.

Nos encontramos con Sergio que se ha marcado un tiempazo de 6h35 (juega en otra liga, que duda cabe ;-), comemos algo recogemos los diplomas, me despido de Pedro y Anita... y al apartamento a darse una duchita, cenar (esta vez no fue pasta, jejejeje) y al sobre! Ya tengo otro dorsal más para colgar en el trastero ;-)

viernes, 20 de junio de 2008

A Sabiñanigo!

Bueno, pues ya ha llegado el momento! ahora a comer, cargar todo en el coche y a poner rumbo a Sabiñanigo.

El domingo, la crónica ;-)

miércoles, 18 de junio de 2008

Susto con la fixie

Hoy he tenido un pequeño susto con la fixie que por suerte no ha tenido consecuencias. Le coge uno gustillo a la cosa, te confias.. y te olvidas de que vas en una bici sin frenos! 

He entrado un poco rápido hacia la cuesta del garaje y resulta que la puerta estaba cerrada. Total que no era capaz de frenar la bici (un desarrollo más corto hubiera ayudado ;-) y la puerta se acercaba cada vez más. Y encima, de repente suena un "craaaack" en la zona del piñón. Ya pensaba que se había partido la cadena y que me la daba.

Por suerte no ha sido nada y he conseguido parar la bici antes de dármela. Eso si, tengo que revisar bien que todas las roscas estén ahora bien apretadas, jejejeje ;-)

Igual no está de más ser un poco menos cool (vaaaaale: ser un poco menos gilipollas ;-) y ponerle un freno delantero para estos casos...

De todos modos es una gozada y dentro de poco habrá novedades por mi parte al respecto. Y hasta aquí, puedo leer... ;-)

sábado, 14 de junio de 2008

1/2 QH ;-)

Hoy por fin ha hecho un poco de sol y he aprovechado para hacer una ruta-test de cara a la Quebranta. Buenas sensaciones aunque he descuidado la alimentación y lo he pagado en los últimos km, donde iba ya muy vacío.

La ruta es en cierto modo una especie de media QH: 102km y algo más de 2000m de desnivel acumulado, subiendo Jaizkibel por Lezo (que podría ser un Somport), Erlaitz por Irún (que es tipo el Marie Blanque, con 1km casi al 10% seguido de 2 km por encima del 11%) y por último Bianditz (12km al 5,5%: largo pero sin grandes rampas, como Portalet). Ah! y para poner la guinda, la subida a Peru de vuelta a casa, haciendo las veces de Hoz de Jaca ;-)


Lo que si he sacado en claro es que voy a dejar el 25 atrás después de ver como he subido el Castillo del Ingles. Otros años he llevado un 27, pero realmente creo que no es necesario (en una semana salgo de dudas).

Mañana estará complicado salir porque Paula está fuera todo el finde y hoy ya he tirado de abuelos, pero intentaré una escapada a la tarde ;-)

miércoles, 11 de junio de 2008

Menos da una piedra

De momento la semana no va mal: lunes y martes rodillo y hoy paseillo con la fixie por la ciudad (y vuelta bajo el diluvio, añado).

No es que sea un gran entreno, pero menos da una piedra ;-)


domingo, 8 de junio de 2008

Semana -2 para la QH

Y la preparación no puede ir peor :-S

Entre el mal tiempo, compromisos varios, el niño (que pobre, siempre poniéndole de excusa), gripes y demás...  me planto a día de hoy con poco más de 2000km en las patas. Así que dentro de dos findes... lo que sea sonará. Mi plan sigue siendo ir a intentar bajar de las 8h, pero si el Portalet me pone en mi sitio, será merecidamente.

Este finde, después de miércoles, jueves y viernes con fiebre (el miércoles tuve 39 en algunos ratos) poco he podido darle al tema. Ayer estaba como si me hubiera pasado un camión por encima y hoy pensaba haber ido a hacer la cicloturista de Hondarribi, pero visto la flojera que tenia he ido con el grupo de los domingos a darle un poco a la BTT (46km).

Así que plan de choque para los días que me quedan: obligarme a hacer algo de rodillo entre semana y el finde a ver si me las apaño para hacer un día una mini QH Giputxi (Jaizkibel por Lezo, Erlaitz por Irun y Bianditz haciendo de mini-portalet ;-) y otro día a ver si hago BTT con Igor, que le tengo un poco abandonado al hombre.

Y la semana que viene más rodillo, repaso general a la bici y... rumbo a Sabiñanigo! 

lunes, 2 de junio de 2008

Aprender a nadar

En mi imparable deslizamiento hacia el lado oscuro de la fuerza (triatletica) y con la excusa de que ibamos a apuntar al peke a los cursos de verano para que le fuera cogiendo el truco al agua, me acabo de apuntar a un cursillo de 10 días en julio de natación para adúlteros ;-)

A ver si consigo coger un mínimo de técnica, porque ahogarme no me ahogo, pero es que a lo perro se avanza más bien poco, jajajaja. 

Ya lo dice el refrán: from lost to the river! ;-)

domingo, 1 de junio de 2008

Ponerle baca a un Ferrari

Más o menos sería el equivalente a lo que he hecho este finde en las landas ;-)

Apuesto a que no se encuentran por la red muchas fotos de una Dean (o similar) así, jejejejeje.

Eso si, hemos ido Eneko y yo estupendamente (el rato que no ha llovido, claro ;-)

Km? pocos! media? baja. Importa? nada!